Los animalitos obedecen sus propios instintos con gozosa e ilimitada libertad. Y en más de una oportunidad debiéramos aprender de ellos: se alegran cuando ven a quien les cuida y les da de comer, demuestran afecto, actúan con lealtad, “no se preocupan” por qué comer o qué vestir, siempre quieren jugar…
También es real que en tiempos difíciles pudimos haber pensado: “me gustaría ser uno de ellos…” en un intento por abstraernos de una difícil realidad.
Pero lo importante es que descubramos que nuestro Buen Dios y Padre -que también ha creado a los animales- tiene por nosotros los hombres, un CUIDADO e INTERÉS ESPECIAL; lo dice la Biblia: “Mirad las aves del cielo: no siembran, ni cosechan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿NO VALÉIS VOSOTROS MÁS QUE ELLAS?” (Mt 6:26). Esto es maravilloso!!!
Y también dice “NO ANDÉIS, pues, PREOCUPADOS diciendo: ¿Qué vamos a comer?, ¿qué vamos a beber?, ¿con qué vamos a vestirnos?” (vs. 31)
Querido, tienes un Padre en el Cielo que TE AMA tan profundamente que no dudó en entregar a Su propio Hijo Jesucristo por amor a ti y a mí, asique NO TE PREOCUPES: Él te está cuidando y se ocupa de ti. Confía plenamente en DIOS!!!
Ahora sí, sabiendo esto, disfruta de tu vida y ponte por encima de toda circunstancia, pues DIOS ESTÁ CONTIGO.
Él te bendiga abundantemente.
Ah!!! Hermano querido, te presento a Elvis.